Mendoza es la primera provincia con producci&oacute;n oliv&iacute;cola del pa&iacute;s que cuenta con Indicaci&oacute;n Geogr&aacute;fica de &ldquo;Aceite de Oliva Virgen Extra de Mendoza&rdquo; (AOVE). Con asistencia del INTI, una de las empresas que logr&oacute; obtener el sello es la oliv&iacute;cola Laur, productora pionera del sector, ubicada en el departamento de Maip&uacute;. La Indicaci&oacute;n Geogr&aacute;fica (IG) consiste en un sello de calidad y genuinidad que forma parte de una estrategia de diferenciaci&oacute;n, mediante el cual el consumidor puede identificar la procedencia y reconocer los atributos del aceite producido con aceitunas mendocinas. Para la presidenta del INTI, Sandra Mayol, &ldquo;los sellos de identificaci&oacute;n geogr&aacute;fica resultan estrat&eacute;gicos para posicionar los productos argentinos en nuevos mercados y, en esta direcci&oacute;n, el Instituto desempe&ntilde;a un rol clave en el acompa&ntilde;amiento a los productores oliv&iacute;colas de Mendoza a fin de que &eacute;stos puedan cumplir con las caracter&iacute;sticas necesarias para alcanzar el sello&rdquo;. Por su parte, Cecilia Espejo -directora de alimentos del INTI de la regi&oacute;n de Cuyo, a cargo del laboratorio para determinar los atributos del aceite- explic&oacute;: &ldquo;La empresa debi&oacute; cumplir con una serie de requisitos legales y t&eacute;cnicos para lograr el reconocimiento de origen, entre ellos, la realizaci&oacute;n de ensayos anal&iacute;ticos que incluyeron la determinaci&oacute;n de acidez, el &iacute;ndice de per&oacute;xidos y el perfil de &aacute;cidos grasos del aceite, entre otros par&aacute;metros&rdquo;. La especialista agreg&oacute; que&nbsp;&ldquo;en Mendoza, sus caracter&iacute;sticas principales son el alto contenido de &aacute;cido oleico y su perfil sensorial&rdquo;. <p style="text-align: center;"> El en&oacute;logo especializado en aceite de oliva y gerente general de Laur, Gabriel Guardia, destaca que el sello &ldquo;le abre una vidriera a la producci&oacute;n de aceite de oliva de calidad de nuestro pa&iacute;s&rdquo;, al tiempo que destaca la particularidad de la producci&oacute;n con la variedad Arauco. El clima &aacute;rido y seco de la regi&oacute;n, con grandes variaciones t&eacute;rmicas, favorece la lipog&eacute;nesis -un proceso qu&iacute;mico natural mediante el cual se sintetizan los &aacute;cidos grasos en la aceituna-. Esto se traduce en la presencia de polifenoles muy altos que otorgan caracter&iacute;sticas organol&eacute;pticas distintivas. &ldquo;Nuestro Arauco tiene un amargo, un picante, un herb&aacute;ceo y un equilibrio que son realmente distintivos del resto de los terroirs de Argentina&rdquo;, resalta el gerente de la oliv&iacute;cola. Teniendo en cuenta esta ventaja, la empresa se encuentra trabajando con el laboratorio de alimentos del INTI en la cuantificaci&oacute;n de polifenoles de sus productos. Laur envasa anualmente entre 600 y 700 toneladas de aceite de oliva y durante 2023 estiman el etiquetado de 200 mil botellas con el sello IG, provenientes de su finca certificada Cruz de Piedra. Tiene una fuerte presencia en el mercado interno con llegada a todo el pa&iacute;s y exportan a Brasil, Ecuador, Panam&aacute; y Costa Rica, con la expectativa de alcanzar m&aacute;s destinos internacionales. Entre sus logros m&aacute;s destacados, la firma mendocina obtuvo el primer lugar en los dos &uacute;ltimos rankings internacionales de Aceite de Oliva Extra Virgen (EVOO). El sello IG Mendoza es resultado del trabajo conjunto entre el Instituto de Desarrollo Rural (IDR), la Asociaci&oacute;n Oliv&iacute;cola de Mendoza (Asolmen), la Universidad Nacional de Cuyo, Obra Don Bosco, el Instituto Nacional de Tecnolog&iacute;a Agropecuaria (INTA) y el gobierno de Mendoza. Actualmente son 25 las marcas comerciales de aceite que portan el sello IG Mendoza en las etiquetas de sus productos